#Oscars2012

Debi haber publicado esto hace mucho, pero no había pensado en un blog desde el último episodio que vi de Awkard en MTV.

Anoche se celebraron los Premios Oscar de la Academia, en su edición número 84... Me emocionó esta entrega más que la de los años anteriores pues vi con antelación casi todas las películas nominadas y debo decir que no hubo ninguna mala, fue un excelente año lleno de guines originales, fotografía y banda sonora preciosa. 

El 2012 es un año que va a marcar la historia del cine con la grandiosa The Artist; una comedia muda en black and white ambientada en los años 20 cuando el cine paso una gran transcisión: los gestos y las expresiones exageradas y dramáticas ya no eran lo IN, mediante la tecnología ahora las voces dominaban los recintos cinematográficos. George, un joven actor en la cumbre de la fama, no logró adaptarse y decidió seguir haciendo películas mudas, pero la decepción lo embargó cuando no consiguió del público la respuesta deseada. Peppy Miller, una chica que admiraba a George que si de Justin Bieber se tratase, consiguió una audición y gracias a su encanto y dominio del baile se catapultó a la pantalla grande destronando a todas las estrellas del cine mudo, entre ellas su amado George. Es una película divertida, a pesar de carecer de diálogo no aburre, atrapa antes de los 10 minutos de film. Hay que aplaudir a Michel Hazanavicius (Ganó Mejor Director) por tomar el riesgo de filmar una película en este formato entre tantos efectos especiales y con un público más kinestésico que nunca.

En cuanto a la otra favorita del aclamado director Martin Scorsese, "Hugo" adaptado del libro The Invention of Hugo Cabret escrito por Brian Selznick, se puede decir que es un homenaje a los inicios del cine, un bello agradecimiento a todos aquellos hombres y mujeres que se esforzaron porque la pantalla grande fuese no solo entretenimiento sino magia. La invención de Hugo Cabret nos lleva a Francia, dentro de un reloj enorme donde vive un niño delgado, pálido, de ojos azules enormes que además tiene un coeficiente muy alto para su edad; cuida del reloj de la estación para tener un lugar donde vivir, y mientras tanto, intenta reparar un pequeño "autómata", un robot que se encarga de hacer tareas simples como escribir o dibujar pero que para la época era todo un avance tecnológico. Hugo se encuentra muy encaprichado por el autómata pues fue el único legado que le dejo su padre antes de morir en un incendio. El pequeño Hugo tiene el placer de conocer al ilusionista y cineasta Georges Méliès, que ahora trabaja en una pequeña jugueteria de la estación luego de haber sufrido una gran depresión tras la guerra y la consecuente caída del espectaculo. Es aquí donde Scorsese nos narra vividamente lo importante que fue Méliès para la cinematografía, como con su visión surgió el género de ficcion y los efectos especiales. Es un film verdaderamente especial para los amantes del septimo arte.

Sin duda, yo ame las dos películas.